Vacaciones colaborativas
Enero arde. Es temporada altísima de vacaciones en Argentina, Uruguay, Chile y el sur de Brasil. Casi todos los alojamientos turísticos están llenos y reservados para toda la temporada, casi todos los pasajes ya vendidos, y lo poco que queda disponible cotiza a precio de oro.
Pero viajar no tiene por qué ser un gastadero de plata, ni un estresazo. Si se cambian algunas premisas adquiridas a fuerza de costumbre y publicidad, las vacaciones al estilo colaborativo pueden ser no solo una solución de último momento, sino un bienvenido cambio de paradigma en la organización del descanso.
Según el informe de tendencias globales presentado en el encuentro World Travel Market 2013, la tendencia más saliente del turismo en Europa es “la nueva generación de viajes p2p”, o entre pares, a pesar de la batalla legal que están presentando en muchos países las cámaras de hotelería. “Conseguir un buen valor por el dinero es crucial, así como la autenticidad superior de la experiencia de vacaciones ofrecida”, asegura el informe, con datos de Euromonitor International.
Aquí también, las opciones colaborativas crecen. ¿Te animás a sumarte? En vez de alojarte en hoteles, probá pasar tus vacaciones en casas de otras personas. En la página de alojamiento de la guía hay un abanico de opciones. Si estás dispuesto a un cambio radical, jugate por el couchsurfing, la red internacional de viajeros que ofrecen alojamiento, compañía e información gratis en todo el mundo, por el solo gusto de compartir. Si es demasiado extremo para vos y preferís descansar en una habitación con privacidad garantizada, podés alquilar piezas, cabañas, departamentos y hasta castillos en las plataformas de alojamiento p2p como Airbnb, Zukbox o Segundohogar, donde particulares ofrecen sus espacios y son reseñados por los usuarios. Si no tenés plata pero necesitás privacidad, probá el intercambio de casas de la red Knok.
¿Cómo llegar a donde querés ir? Si no es demasiado lejos, probá compartir un viaje en auto. En Argentina hay muchas redes que proponen compartir trayectos; podés verlas en la página de movilidad. Quizás, si estás indeciso, los viajes propuestos te ayuden a decidir tu destino. Por ejemplo, en Vayamos juntos, Agustín propone ir de Caballito a Mar del Plata por $100; en Coviajero, un usuario ofrece dos lugares para ir del microcentro porteño a las cataratas del Iguazú, también por $100. Y si sabés dónde querés ir, nadie propone ese viaje y tenés auto, posteá vos el trayecto para que otro pueda compartirlo y dividir el costo.
Pero si te encaprichaste con ir más lejos, y ya conseguiste un anfitrión buena onda en couchsurfing, y solo te falta la plata para el pasaje… podés sacar un crédito p2p de finanzas colaborativas, con menos vueltas e intereses más bajos que un banco.
Si a pesar de todo decidís pasar el verano en tu casa… en el próximo post, opciones para sacarle el jugo a la red de recursos colaborativos.