Una aplicación para donar las sobras
Hubo fiesta anoche y pidieron pizzas. Ahora estás ordenando el living y entre botellas semi vacías y vasos sucios, te encontrás con dos porciones de fugazzeta que sobraron. ¿Las tirás a la basura? ¿Las guardás en la heladera para desayunarlas frías? Puede ser, pero también tenés una tercera opción: donarlas.
Para eso, crearon en Estados Unidos la aplicación gratuita para smartphones Leftover Swap (literalmente “intercambio de sobras”), que conecta a gente que tiene hambre con gente que tiene restos de comida. La cosa es así: le sacás una foto a esas dos porciones de fugazzeta (o a cualquier comida que te haya sobrado), la subís a tu perfil y la app busca gente en la zona que tenga ganas de comerla.
“Hay estudios que indican que para el año 2050 nuestro actual ritmo de producción de alimentos no será suficiente para alimentar a toda la población. Y mientras tanto, en EE.UU. producimos tanta más comida de la que necesitamos, que mucha termina como desperdicio”, asegura Dan Newman, uno de los creadores de la app, que también comenta que existe un bache legal a resolver: ¿quién garantiza que los alimentos que sobraron no son nocivos para la salud del consumidor?
De hecho, las autoridades sanitarias de San Francisco ya tomaron cartas en el asunto: “Los restos de comida son una gran fuente de enfermedades”, declaró Richard Lee, director del Departamento de Salud de esa ciudad. Como en todo intercambio descentralizado entre pares, no hay una entidad superior que controle y garantice la seguridad. Por eso, la guía del sitio de LeftoverSwap propone: «No dones nada que no comerías vos. No te lleves ninguna comida sin saber qué tan vieja es ni sin asegurarte de que estuvo bien conservada. Mantenete tan alerta como (en el sitio de avisos clasificados p2p) Craigslist; si algo se ver raro, no lo hagas. Prepará bien toda la comida que recibas, cocinándola y lavándola todo lo necesario».
Está claro que los homeless de San Francisco no tienen un smartphone con 3G como para localizar a quienes tengan comida de sobra. Pero seguramente la app tendrá sus seguidores especialmente en los campus y las comunidades universitarias de EE.UU.
¿Y acá? Acá todavía no tenemos una aplicación para intercambiar sobras, pero sí tenemos sobras. Particularmente en estos días festivos. Si después de la Nochebuena te queda la heladera llena de vittel thoné, invitá a amigos a comer. Y si no podés ver más ese vittel thoné, tocale el timbre al vecino y donáselo, u ofrecelo en Facebook, o dejalo en la plaza más cercana con un cartelito; opciones analógicas mientras esperamos la app correspondiente.
Yapa: “El escándalo del desperdicio mundial de comida”, charla TED de Tristram Stuart.